INTERSOMOS

EN LA CLÍNICA HEMOS DISEÑADO UN CONJUNTO DE EXÁMENES CON EQUIPOS TRAÍDOS DE EE. UU. Y EUROPA, QUE NOS PERMITEN LLEVAR A CABO UN DIAGNOSTICO AÚN MÁS DETALLADO. ESTOS EXÁMENES SE PUEDEN COMBINAR PERFECTAMENTE CON LOS CLÁSICOS EXÁMENES DE LABORATORIO. POR SÍ SOLOS SON UN GRAN COMPLEMENTO, YA QUE NOS DAN SEÑALES DE ALTERACIONES AÚN CUANDO LOS VALORES DE EXÁMENES BIOQUÍMICOS SEAN NORMALES. EN ESE SENTIDO, SON EXÁMENES TOTALMENTE PREVENTIVOS, E INCLUSO CON PACIENTES QUE ESTÉN CURSANDO UNA PATOLOGÍA, SON EXÁMENES QUE NOS AYUDAN A EVALUAR EFECTIVIDAD DE LOS TRATAMIENTOS. LE HEMOS LLAMADO TEST VITAL, EN CUANTO NOS DAN VALORES APROBADOS POR LA FDA Y LA COMISIÓN EUROPEA DE SALUD DE ENVEJECIMIENTO PRECOZ, ESTRÉS OXIDATIVO, Y CARGAS TOXICAS EN EL ORGANISMO.

Es un estudio que se hace en microscopio óptico de una gota de sangre coagulada. Permite tener una visión cualitativa de los niveles de estrés oxidativo que está padeciendo el organismo. Este examen es considerado dentro de los logros más importantes como método diagnóstico, y se encuentra enmarcado en un proyecto de investigación internacional. Este estudio morfológico de la sangre fue descrito por primera vez por el Dr. Bolen, en el Hospital de Massachusetts (EE. UU) para diagnóstico y evolución de cánceres gastrointestinales durante los años 50.

Posteriormente, White y colaboradores descubrieron que dichas alteraciones también se presentaban en otro tipo de patologías crónico-degenerativas. Con la evolución científica, el perfeccionamiento de la metodología y, principalmente, por la calidad de resolución óptica obtenida por la microscopía, han permitido esclarecer los mecanismos anatomopatológicos involucrados. Y es así que desde 1979, en los laboratorios del American Biologics Institute, los doctores Bradford, Heitan y Lagarde, realizaron varios experimentos y pruebas relacionadas a la presencia de Radicales Libres con diferentes dolencias crónico-degenerativas.

Permiten tener una visión del proceso evolutivo fisiológico o patológico de un paciente.

Es un examen que posibilita tener un recurso suplementario para definir estrategias de uso de antioxidantes y suplementos alimenticios.

Es un equipo médico aprobado por la FDA, que usa una corriente de 0,1 mv (milivoltio) a 300 mA (microamperes). Para tener una noción de lo bajo de estos valores, la pila más chica del supermercado es de 1,5 V y tienen un amperaje 2,4 amperios. Es decir, que es imperceptible.

Se utilizan 6 electrodos: dos en la frente, dos en cada mano y dos en cada pie y en secuencia. Sucesivamente, cada uno funciona como emisor de esta corriente y los otros como receptores. Mediante un software que utiliza los valores recolectados por estos electrodos, el equipo nos entrega información como porcentaje de agua, grasa, hueso, en relación con el peso total e información en cuanto a vitalidad de los diferentes sistemas del organismo como sistema endocrinológico, sistema inmune, cardíaco, digestivo, neuronal, renal y respiratorio.

El ESTECK-COMPLEX, equipo de origen norteamericano, aprobado por la FDA para medir Riesgos Cardiometabólicos.

Utiliza la misma tecnología de la Impedanciometría, pero además usa un oxímetro de pulso que nos permite medir la saturación de oxígeno, y un tensiómetro. El resultado obtenido, en base a tres pilares: Estilo de vida – Sistema Nervioso autónomo – Sistema Vascular, nos permite analizar y evaluar riesgos de hacer enfermedades cardiovasculares en base a los datos metabólicos. Es capaz de medir edad biológica arterial versus edad cronológica con el fin de estudiar envejecimiento precoz y tomar medidas necesarias para contrarrestar cuando los valores están alterados.

El Oligoscan es un equipo médico que nos permite tener una medición de los principales minerales que tienen que estar presentes en el organismo para su óptimo funcionamiento. Además, aporta información sobre la presencia de metales pesados y algunas vitaminas. De la composición mineral, de metales pesados y vitaminas, es capaz de llegar a una aproximación del estrés oxidativo presente en el organismo.

La detección de metales pesados en medicina es fundamental, ya que si bien existen casos aislados de intoxicaciones agudas con alguno de ellos, por ejemplo con el plomo, al parecer cada vez se los relaciona con enfermedades neurodegenerativas progresivas, cuyos efectos se van viendo con los años.

La técnica utilizada para este examen es la espectrofotometría, puede parecernos una palabra rara, pero en verdad oímos mucho hablar de ella. Cada vez que en algún medio de comunicación nos informan que a años luz existe un planeta similar a la tierra, pocos nos preguntamos: ¿cómo saben, si nunca hemos llegado ahí? Por espectrofotometría.

Estos son equipos capaces de captar la luz ultravioleta y visible del espectro, y de ahí saber de qué se compone la materia.

Un software cruza la información medida con el grupo sanguíneo del paciente. Para esto es necesario tener previo conocimiento del grupo sanguíneo antes de realizar el examen, y de ahí se determinan los valores existentes.

De la composición mineral, de metales pesados y vitaminas, se es capaz de llegar a una aproximación del estrés oxidativo presente en el organismo.

Estos valores están regulados por la OMS (Organización Mundial de la Salud – Oligoelementos en Nutrición Humana y Salud. Ginebra. -1996-).

Este método es útil para evaluar patologías existentes, como también es utilizado como método preventivo, ya que con medidas sencillas se puede disminuir la carga de metales pesados.

Mediante pruebas de diferentes biomarcadores, el Agemeter nos permite calcular la edad funcional del organismo. Es sabido que, con el envejecimiento, nuestro organismo va disminuyendo sus capacidades funcionales. Pero con nuestra vida moderna, sobrecargada de estrés, de alimentarnos con muchos procesados, conservantes, colorantes, pesticidas, fertilizantes, respirar el aire que estamos respirando, la desregulación de nuestros relojes biológicos, el efecto de los diferentes campos electromagnéticos, nuestra edad biológica se ha visto mermada con respecto a nuestra edad cronológica.

A través de biomarcadores, el Agemeter nos permite ver nuestra edad biológica. Y desde ahí se podrán tomar medidas de medicina preventiva que nos permitan envejecer en armonía.